Salatiel Arroyo
Una vez definidas las coordinaciones nacionales, una en defensa de la 4T y la otra del Frente Amplio por México, que no son otra cosa que candidaturas o precandidaturas adelantadas a la presidencia de la república (una de ellas impugnada y seguramente judicializada), el siguiente paso sería definir a los aspirantes al Senado de la República y Diputados Federales, tarea que tradicionalmente recae en los consejos nacionales de los respectivos partidos políticos, con la anuencia de los candidatos presidenciales y del presidente de la república, en el caso de Morena.
En Michoacán se perfilan al Senado, entre otros: Raúl Morón Orozco, Carlos Torres Piña, Giulianna
Bugarini, Fabiola Alanís Sámano, Leonel Godoy Rangel, Fidel Calderón Torreblanca, por la 4T. Por el Frente Amplio por México, Silvano Aureoles Conejo, Marko Cortés Mendoza, Adriana Hernández Iñiguez, Daniela de los Santos Torres, Germán Martínez Cázares, Mauricio Prieto, Francisco Huacus Esquivel.
Cómo la elección presidencial se pronostica competida y con resultados cerrados en las urnas, los dueños de los partidos de oposición y quiénes deciden desde el partido de estado, pretenderán designar como candidatos a los perfiles que más capital (financiero y electoral) aporten a la campaña presidencial, desde lo municipal, estatal y federal.
Respecto a Zitácuaro, Morena y PT llevan ventaja, en cuanto a perfiles competitivos, entre los que se ubican Rosa María Salina Téllez, con un liderazgo sólido, producto de una década constante de trabajo social, de gestión de productos de la canasta básica, materiales para construcción y ahora también medicinas a precios accesibles, conservando contacto permanente con simpatizantes y fortaleciendo su estructura política y electoral. Todo ello realizado con el esfuerzo propio, sin ostentar cargo público, ni distraer recursos del gobierno.
Rosy Salinas sería la candidata natural de Morena a la presidencia municipal de Zitácuaro, su partido se la debe, pues la ha dejado sola las dos últimas elecciones en las que ha participado y la victoria se le ha arrebatado en la mesa de negociaciones, donde sus representantes y las dirigencias partidistas de la coalición no han defendido sus votos.
Otro cuadro competitivo de la Cuarta Transformación es la diputada federal Mary Carmen Bernal
Martínez, quien lleva, ininterrumpidamente, desde el 2012, favorecida con la ubre presupuestal.
Tiempo durante el cual ha sido regidora (mientras su señora madre fungía como diputada federal),
luego diputada local, posteriormente legisladora federal, mientras su hermana Nely Berenice se
desempeñaba como regidora y reelecta como diputada federal, tiempo durante el cual ha logrado
construir su capital económico y político para participar como candidata a la alcaldía.
Otro proyecto con liderazgo político, podría ser Emma Rivera Camacho, coordinadora en la región
Oriente de los programas sociales del gobierno federal, principal fortaleza electoral de Morena.
Mario Vallejo Estévez, constante luchador de izquierda, ex diputado federal, recientemente dimitió al cargo de funcionario estatal (Director de Asentamientos Humanos), integrante del equipo político de Leonel Godoy Rangel. Otro elemento que entraría a la jugada pre electoral en la región, es el presidente del Consejo Político Estatal de Morena, Gotardo León Villalobos.
En la oposición son pocos los aspirantes, la lista la encabeza la diputada local Gloria Tapia (PRI), que podría pretender la alcaldía o la reelección; la regidora Erica Karina Alvarado Alcantar, con excelente ficha curricular académica y trabajo de campo en materia de gestión a productores agrícolas. Ella podría ser buena candidata a diputada local, lo mismo que sus compañeros en Cabildo, Ulises Romero y Aldo Argueta.
TOÑO IXTLÁHUAC POR MORENA
Además de las personas antes citadas como posibles aspirantes, se perciben otros dos proyectos
electorales sólidos, que podrían influir o inclinar la balanza a favor de la victoria o la derrota en las
urnas.
Uno de ellos es Juan Antonio Ixtláhuac Orihuela, quien conquistó la alcandía de Zitácuaro bajo las
siglas del PAN-PRI y PRD, partidos que hoy integran el Frente Amplio por México. Sin embargo, a Toño Ixtláhuac se le ha observado más cercano a los dueños de Morena en Michoacán, que a los partidos que lo convirtieron en candidato y alcalde. Tal vez por ello se ha especulado con insistencia que podría ser candidato de Morena a la alcaldía, diputación federal o local.
Al respecto es pertinente señalar que, si los que mandan en Morena realmente estiman a Ixtláhuac, no lo expondrán al repudio de su militancia en las urnas y lo integrarán en los primeros lugares de la lista plurinominal. Les diré porque: Es cierto que Juan Antonio tiene liderazgo propio, que apoyado por las estructuras del PRD-PRI y PAN, más los recursos del gobierno del estado (Silvano Aureoles, Carlos Maldonado y Carlos Herrera) contribuyeron para que se alzara con la victoria en las urnas. Tal vez si fuera candidato a la reelección por los mismos partidos sería más competitivo, que si se lanza por Morena.
Porque si se va a Morena, Verde o PT, las dirigencias y militantes del PRI-PAN y PRD lo verán como un
ingrato y desleal y no lo seguirán. Salvo sus incondicionales de siempre, que resultan insuficientes hasta para competir.
Ahora bien, si los dueños de Morena lo imponen como candidato, de manera directa o a través del PVEM o el PT, los liderazgos locales de dichos partidos podrán simular que aceptan la imposición y decir que lo apoyarán, pero no hacerlo. Pues dudo les agrade ser desplazados; es decir, entregar el liderazgo que han construido para que un arribista lo explote y de paso se apodere del partido, quitándoles incluso la oportunidad de que ellos y sus cuadros puedan volver a competir. Porque el poder no se comparte, se arrebata y ejerce.
Me resulta difícil imaginar a los Morenistas de “hueso colorado”, a esos críticos recalcitrantes en contra del viejo PRI “corrupto”, del PAN de “extrema derecha” y del PRD del “repudiado Silvano”, pidiendo el voto para un PRIANISTA Silvanista. Aunque en política es común tragar excremento, sin hacer gestos.
Por eso afirmo, si los que deciden en Morena en verdad estiman a Ixtláhuac, no lo pondrán en
predicamento. Y por ese afecto, seguramente le cederán algún espacio, destinado para ellos mismos, en las listas plurinominales, bien a la Cámara de Diputados o al Congreso Local. Ahora que sí es a la Cámara de Senadores, significaría que el afecto es real y efectivo.
Otro elemento que ha estado incursionando como posible aspirante, es el empresario restaurantero Guillermo Estefan, quién ha logrado importante aceptación en sectores de la zona urbana del municipio. Memo seguramente será proyecto de Movimiento Ciudadano a la presidencia municipal de Zitácuaro.
Las precampañas políticas son también aprovechadas por algunas personas que no han logrado superar la nostalgia por los reflectores, que se involucran o levantan la mano en busca de incautos a quién “venderles” un capital político que no tienen.
LA FORTALEZA POLITICA DE LOS AUTOGOBIERNOS EN ZITÁCUARO
En Zitácuaro se ha gestado un liderazgo con más fortaleza y solidez que cualquier otro. Se trata de los autogobiernos de los pueblos originarios, surgido para proteger a sus familias y comunidades de la inseguridad y violencia, causadas por la corrupción e incompetencia de las autoridades federales, estatales y municipales.
El peor azote en la actualidad para la población, es precisamente la incertidumbre por la amenaza
constante de los grupos delictivos y la descomposición de las fuerzas gubernamentales de seguridad (que suelen ser peores estas que los criminales comunes, por ventajosas, cobardes y voraces). Pero en las comunidades indígenas con autogobierno han logrado protegerse de ese flagelo, creando su propia policía, integrada por personas propuestas por cada localidad, de acuerdo a la conducta que han observado en la misma, además cada miembro de la corporación se encuentra bajo permanente vigilancia ciudadana.
La seguridad pública y correcta aplicación del presupuesto participativo directo está funcionando en Crescencio Morales, Donaciano Ojeda y Carpinteros, de tal manera que otras comunidades indígenas de la región buscan acceder a dichos beneficios, haciendo que el movimiento crezca y se fortalezca. Incluso ciudadanos de colonias populares de la ciudad intentan implementar esos modelos de autoprotección, solicitando orientación a los dirigentes. Otros más quisieran trasladar sus domicilios a esa zona.
Ese movimiento a construido un liderazgo fuerte, que, si se traslada al ámbito electoral, representaría alrededor de 8 mil sufragios casi cautivos, que definirían (a favor o en contra) la victoria en una elección municipal, diputación federal y local. Lo que significa que como aliados se han convertido en indispensables, y competitivos si intentaran incursionar con candidato propio.
Pues con hechos están demostrando la viabilidad en sus formas de organización. Además, ese modelo ha funcionado en otra región del estado, concretamente en Cherán, donde expulsaron a los partidos políticos, el peor cáncer social, y el municipio es gobernado exitosamente por un Consejo Comunal, dónde ya no hay criminales, ni políticos.
En Zitacuaro, al inicio del movimiento de los autogobiernos, se percibía a las comunidades
indígenas como pueblos beligerantes, pues bloqueaban carreteras, establecían retenes, andaban
armados y no permitían el acceso a sus comunidades. Pero, pues todo movimiento realmente
transformador causa incomodidades y pérdidas, incluso humanas, ellos las tuvieron, algunos
fueron asesinados. Por eso se organizaron y lucharon por reestablecer la paz.
Hoy esa percepción ha empezado a cambiar y la fortaleza se demostró en el transcurso de la semana, cuando se movilizaron alrededor de mil personas para trasladarse a Morelia y protestar contra el hostigamiento que se ha estado ejerciendo en perjuicio de algunos de sus liderazgos. Difícilmente algún político local cuenta con esa capacidad de organización y movilización.