Martha Elba Torres Martínez
Ciudad de México, a 27 de julio de 2024.- El martes 23 que Claudia Sheinbaum se reunió con el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O en Palacio Nacional, aseguró confiada que “el gobierno de México tiene finanzas sanas” y contará con los recursos suficientes para el proyecto de AMLO de los trenes de pasajeros, para agua, los programas sociales actuales y los que creará, “que en total todos son de 300 mil millones de pesos”; que como ya se terminan las grandes inversiones -Dos Bocas, Transístmico y Tren Maya-, “se puede orientar a la nuevas inversiones” el presupuesto para 2025 con que le tocará arrancar.
López Obrador celebró que tanto la nueva presidenta y su secretario se pongan de acuerdo, porque “no hay ningún riesgo, no hay ningún temor a nada, y además las finanzas públicas están muy fuertes en nuestro país». «La presidenta electa tiene mucha experiencia en manejo de las finanzas públicas, en el ejercicio del presupuesto, en programas, en proyectos, sabe», dijo en su mañanera.
Pero en dos patadas -como en dos minutos, según el pelos de zacate de Trump, el crimen organizado mexicano puede quitar a un presidente-, el gozo se va al pozo:
La inflación arañando 6 por ciento; el dólar tasó esta semana en los 18.40 pesos y 13 instituciones financieras han bajado sus expectativas de crecimiento de México a 2.1 por ciento este año y 1.7 para 2025. Y todavía, la relocalización (nearshoring) de la “esperanza” que fue Tesla, se aplaza quien sabe hasta cuándo, si gana el republicano las elecciones en noviembre.
Y pues Claudia puede ser muy chucha cuerera en finanzas, pero no le queda de otra que aceptar las “cuentas alegres” de Ramírez de la O, respecto a un déficit de 3 por ciento, “que es algo que acepta cualquier Gobierno, tampoco estamos programando un endeudamiento importante (este 2024 la adquisición de deuda es por 1.72 billones de pesos), prácticamente los vencimientos que vienen, las amortizaciones… se está revisando esa parte… de cuánto podría soportar el Presupuesto en una relación razonable con el PIB”.
Le están mintiendo a lo gacho a la mujer, pero ya se dará cuenta a partir del primero de octubre. Las finanzas públicas no están bien por los excesos del Presidente saliente; la microeconomía, el bolsillo familiar y el subsidio gubernamental como llega se va por lo duro del alza de precios. Y no es pesimismo y menos catastrofismo, pero los entornos pintan cada vez más adversos por la deuda, el bajo crecimiento, altas tasas de interés que encarecen el crédito y el muy posible triunfo de Donald Trump. López Obrador esquiva la putiza discursiva con que “esta en campaña” pero si en una de esas la cumple, ya nos cargó.
En abril pasado, la Secretaría de Hacienda dio a conocer los Pre Criterios Generales 2025; para reducir el déficit público de 5.0 por ciento -los especialistas dicen que es de 6 por ciento- a 2.5 por ciento del PIB, entre 2024 y 2025, planteó un recorte del gasto neto pagado en este último año de 8.8 por ciento en términos reales, es decir, de los 9.14 billones de pesos a ejercer este 2024, en 2025 que inicia Sheinbaum, sería de 8.66 bdp.
El Saldo Histórico de los Requerimientos Financieros del Sector Público (SHRFSP) –la medida más amplia de la deuda del sector público federal– alcanzaría en 2025 los 18.16 billones de pesos, saldo equivalente al 50.2% del PIB. El costo financiero de la deuda llegaría a 1.23 billones de pesos en 2025, monto que equivale al 14.2% del gasto estimado para ese año.
Estos son los propios datos de Hacienda, no cuentos de la oposición ni del conservadurismo. Su padre político le heredará un mega desmadre en lo político por la reforma judicial, en salud, educación y seguridad, una economía prendida con alfileres, y todavía haciéndose el chistoso con esa carta a Trump pidiéndole que no lo mande a la chingada porque sigue siendo Presidente hasta el 30 de septiembre. El mensaje cifrado de esa expresión del gringo, es que ya no lo ve -ni a él ni a la entrante presidenta-, solo a México petrificado ante los cárteles de la droga.
Pero estoy con los números del gastino sexenio de AMLO y la pobreza que le dejara a Claudia con el medio billón de pesos de recorte para 2025. ¿De dónde saca que 300 mil mdp le alcanzará para los trenes de pasajeros, proyectos de agua y programas sociales cuando nada más la pensión del adulto mayor representa este año 544 mil mdp?
Cierto que uno de los logros de este gobierno fue la mejora en la recaudación fiscal.
El SAT acaba de dar a conocer que en la actual administración se ha recaudado 3.4 billones de pesos por auditorías y promoción de cumplimiento, esto es, 2.2 billones más que el sexenio anterior, lo que representa un crecimiento real del 113.4 por ciento.
Un billón 380 mil mdp se obtuvieron por auditorías a grandes contribuyentes, 1 billón 56 mil 576 mdp de pequeños y medianos y cerca de un billón por promoción del cumplimiento.
Valió la pena que el Presidente cada rato amenazara a los potentados del dinero, generalmente sus cuates, con balconearlos por evasores y ojalá llega a la meta de tributación de 5 billones al cierre de este año.
Raquel Buenrostro fue buena recaudadora y lidió como secretaria de Economía este sexenio. Pero una cosa es corretear a los grandes morosos fiscales y otra a los corruptos de este gobierno, que oficialmente nada más fue Segalmex; todos los contratos a los amigos, parientes y colaboradores de los “potentados de la 4T” con empresas “fantasma” pasarán sin sanción alguna…
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En entrega anterior me referí al atorón que tendrá Sheinbaum Pardo con los apoyos a mujeres de 60 a 64 años -3 millones- y estudiantes de educación básica -21 millones-. Hay programas para prácticamente todos: para vivienda (hasta 63 mil pesos); viejitos (6 mil pesos bimestral); sembrando vida (6,250 mensual); jóvenes ninis (7,572 mensual por un año) beca educación básica (920 mensual) media superior (920 al mes); nivel superior (2,800 al mes por 10 meses de cada ciclo); discapacidad (3,100 bimestral); cuidado de hijos e hijas de madres trabajadoras (1,600 bimestral hasta los 4 años) y con discapacidad (3,600 bimestral hasta los 6 años). Están pensados así por incorporación al siguiente u otro esquema de subsidio.
Pero me llama la atención el programa que anunció Claudia en Querétaro, el domingo 21: “Hoy por ustedes, mañana por nosotros” para adultos mayores que mencionó, son 12 millones pensionarios del Bienestar.
“Quiero anunciarles algo que he venido platicando en estas giras con el presidente, también ha sido idea del presidente (compartió el crédito). Es un programa especial para las adultas y adultos mayores, no solamente es la pensión, sino que además ahora vamos a llevar a médicos, médicas, enfermeros, enfermeras a la casa de cada uno de ustedes. Vamos a llevar la salud a su domicilio, para que puedan hablar con los médicos, que les tomen los exámenes y también que les lleven, si es necesario, los medicamentos gratuitos hasta su hogar”.
Es el mismo programa cubano de “Médico en tu casa” que implementó en 2014 el entonces jefe de Gobierno capitalino, el perredista Miguel Ángel Mancera y luego Sheinbaum retomó como “Salud en tu vida”. Esta estrategia fue instrumentada por Silvano Aureoles en Michoacán, pero también medio operó en Chihuahua, Sinaloa, Tlaxcala, Tabasco, Chiapas y Durango. Esta iniciativa fue la impulsora de las visitas domiciliarias del ISSSTE y del IMSS en casos de enfermos postrados e imposibilitados para acudir a su unidad médica y que funciona a la fecha.
Estos datos son valiosos para encontrar sentido a “Hoy por ustedes, mañana por nosotros”, porque ahora con el programa IMSS-Bienestar que ofrece servicios gratuitos de atención médica, estudios, medicamentos y cirugías, en teoría, todo adulto mayor esta cubierto y con acceso incluso en las clínicas y hospitales más alejados porque para ello se contrataron 2,700 médicos cubanos más con los que suman ya 3,650, por lo menos oficialmente.
Entonces, ¿para qué visitas domiciliarias a las y los viejitos, si como nunca tienen acceso a atención médica, reciben su pensión bimestral y eso de alguna forma los empodera al seno familiar?
A mi me huele a esa especie de “comprobación de supervivencia” que hasta 2017 tenían que sufrir los pensionados del IMSS, esas tortuosas filas por horas ante la ventanilla para decir: sigo vivito y coleando.
El difuntito Carlos Urzúa, el primer secretario de Hacienda de López Obrador, antes de fallecer a causa de una caída, el 19 de febrero de este año, había asegurado que 600 mil “fantasmas” cobraban la pensión del Bienestar.
En noviembre de 2023, a propósito de la aprobación del Presupuesto de Egresos de este año, la presidenta de la Comisión de Grupos Vulnerables de la Cámara de Diputados, la perredista Gabriela Sodi, tasó los beneficiarios “fantasmas” de la pensión en 1.5 millones, al cruzar los datos del Coneval y del Consejo Nacional de Población (CONAPO) que reportaban entonces 11 millones de mexicanos de 65 años y más, con el registro del programa que entregaba el apoyo a 12.5 millones.
Para esta columnista, Claudia trae sus sospechas, se las compartió al Presidente saliente y este dijo: adelante. Ariadna Montiel continuará al frente de la Secretaría del Bienestar por recomendación, igual de Zoé Robledo en el IMSS. Pero bien vale que comience a sellarles las “fugas” y sacar a los “fantasmas” porque cada año la demanda de beneficios y el monto, crecen.
Y todavía AMLO le cuchilea a los adultos mayores migrantes, que por ser mexicanos tienen derecho a su pensión, unos 326 dólares al bimestre a la tasa actual. Infobae hizo un cálculo y en Estados Unidos habría hoy unos 4.5 millones de potenciales beneficiarios. Ya le conviene a Claudia que su padre político, no hable…