Morelia, Mich., a 5 de enero de 2024.- Un día, Marisol escuchó hablar de Mozart y supo que su vida cambiaría. Hace 11 años comenzó a tocar el piano de una forma muy particular, pues necesita usar los dedos de sus manos para poder leer nota a nota la pieza.
“Soy ciega de nacimiento y desde muy pequeña me gustó la música clásica. Mi abuelito se compró un teclado y fui sacando los sonidos y las notas musicales”, comparte la joven quien desde el Museo del Estado de Michoacán, ha compartido con el público paisajes musicales de Johann Sebastian Bach y Beethoven. No obstante, fue Mozart quien marcaría su camino.
“Un día escuché un cuento de un compositor, Wolfgang Amadeus Mozart, que tocaba el piano y de ahí me empezó a llamar mucho la atención la música”, recuerda al dibujarse una sonrisa en su rostro, pues desde entonces, ha alimentado sus sueños entorno a ella. “La música para mí es algo que me satisface, mi compañera de vida”, comenta.
La intérprete michoacana también ha presentado el concierto para piano y orquesta BWV 1055 de Joan Sebastian Bach, en el Teatro Ocampo de Morelia y dice tener grandes sueños, como poder impartir clases de piano y llevar sus presentaciones a otras partes del mundo.
“Me gustaría viajar, por ejemplo a Francia y a algunas de las mejores salas para dar conciertos. Dar clases y enseñar musicógrafa con el sistema braille que es lo que usamos las personas con discapacidad visual”, finalizó.