Sinopsis política/México, «amigo» de potencia mundial

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J. Salatiel Arroyo Zamora

El nuestro, es un país privilegiado por Dios. Tenemos todo lo que las potencias del planeta
desearían poseer: litorales, manantiales, numerosos ríos de agua dulce, diversidad de flora, fauna,
clima, minerales (oro, cobre, plata, litio), petróleo… por si fuera poco, una envidiable ubicación
geográfica, que nos convierte en vecinos, y ahora “amigos”, de la nación más poderosa del orbe.

Desde hace décadas se nos considera un estado en desarrollo, sin embargo, se padecen gobiernos
propios de países tercermundista. Es decir, nos han sobrado recursos naturales y dinero suficiente
para sostener dos estructuras de poder (formal y fáctico), pero nos han faltado gobernantes
honestos, alejados de la hipocresía, ambición y voracidad.

PRONÓSTICOS ALENTADORES PARA 2023

No obstante, lo anterior, el año comenzó bien y anuncia mejorías. Así lo demuestra el peso
mexicano, que registró su mejor precio frente al dólar desde el 2020 (algunos aseguran que desde
hace 20 años), rompiendo la barrera de las 19 unidades. Cotizándose, desde pasado miércoles, en
18.94 pesos por cada divisa estadounidense. Esto sucedió inmediatamente después de la visita a la
nación del presidente norteamericano Joe Biden, con quien nuestro mandatario nacional, Andrés
Manuel López Obrador, estrechó lazos de cordialidad y amistad diplomática. Posterior a la
detención de uno de los principales objetivos criminales del gobierno de Estados Unidos de
Norteamérica, Ovidio Guzmán López.

En materia de seguridad y combate a la impunidad también se han dado importantes avances, el
miércoles se detuvo a once presuntos autores materiales que atentaron contra la vida del
periodista Ciro Gómez Leyva. Uno de ellos, quien se presume accionó el arma en contra del
comunicador, fue aprehendido en Tancitaro, Michoacán, el día jueves. Aunque aún falta aclarar
quién o quiénes son los autores intelectuales de la agresión y el móvil de la misma. No obstante,
es de reconocer que el gobierno de la CDMX y Secretaría de Seguridad Pública de la ciudad,
actuaron con rapidez, precisión y eficacia. Lo mismos que la Fiscalía michoacana.

Por cierto, con esa misma eficiencia se resolvió -días antes- el secuestro de un joven zitacaurense,
que alarmó a la población, por tratarse del integrante de una familia ajena a prácticas ilícitas y a la
acumulación de bienes materiales. El muchacho, conocido por muchos en el pueblo, por amable,
activo y alejado de la maldad, había sido raptado desde el 27 de diciembre. Afortunadamente la
Fiscalía General del Estado demostró nuevamente su capacidad de respuesta, realizando un
minucioso trabajo de inteligencia que culminó con el rescate sano y salvo del secuestrado, así
como la aprehensión de cinco presuntos criminales.

Sin embargo, hay lastres que se vienen arrastrando desde hace décadas, como el sentimiento
colectivo de que, en nuestras localidades, comunidades, colonias, municipios y estados, no
gobiernan las autoridades electas por la ciudadanía, sino los “otros”. Que imponen la percepción
de que son precisamente las organizaciones delictivas las que mandan, que han penetrado y
sometido a las diversas estructuras del poder público, que mantienen a su servicio para esclavizar,
explotar y despojar los patrimonios de la población, intimidando con acciones generadoras de
terror.

Es verdad que no todo es responsabilidad de los gobiernos actuales, sin embargo, las garantías
elementales del ser humano han sido abolidas de facto, se cancelaron nuestras libertades y hoy
somos esclavos del miedo. Cómo el pánico experimentado por los tres comunicadores de
Guerrero, privados de la libertad entre el 25 y 27 de diciembre y liberados el 11 de enero, sin que
mediaría intervención alguna del gobierno. Fueron liberados porque así lo decidieron los
plagiadores, que presuntamente se equivocaron de objetivo, pues iban por otros periodistas.

Es tal el daño psicológico causado por el terror vivido, que uno de ellos niega rotundamente haber
participado en labores de difusión, como si ello fuese delito. Cuando el delito se cometió en su
contra, pues él es una víctima más de la ineptitud del estado mexicano.

Aunque la inmensa mayoría de mexicanos afirma que estamos muy bien y que el gobierno federal
que actualmente tenemos es mucho mejor que todos los anteriores… pero, a punto de iniciar el
proceso de conclusión del mandato, no se ha notado esa supremacía. Al menos no en materia de
seguridad.

Mientras que para otros–los menos- los gobernantes de ahora no tendrían por qué ser diferentes
a los que dirigían la nación en el pasado, si el origen ideológico y partidista es el mismo… si la
formación cívica y moral abrevada por los que les antecedieron es similar; incluso, salvo algunas
excepciones, son los mismos repitiendo en diferentes posiciones de mando.

Resultando triste que los seguidores del régimen actual utilicen, como instrumento de defensa del
gobierno, la agresión en contra de quiénes disiente de las formas de dirigir la nación. Cuando uno
de los principales deberes cívicos es precisamente someter al escrutinio a los mandatarios y
funcionarios públicos, que tienen la obligación de conducirse de manera honesta, eficiente y
transparente. En lugar de andar defendiendo a personas perversas, tramposas y plagiarias, como
la que se pretendía imponer como líder máxima de la institución administradora de justicia del
país.

Peor, es que señalen a quiénes emiten observaciones en contra del gobierno de ser los causantes
de lo que acontece, cuando muchos de esos críticos acosados no han ocupado cargos de
representación popular, ni de dirección gubernamental. Da pena ajena también que “etiqueten”
despectivamente a los opinantes del sistema de “prianistas” y “perredista”, cuando los personajes
por ellos idolatrados vienen de dichos partidos y con sus siglas se cobijaron para acceder al poder
en el pasado, de donde desertaron de forma desleal cuando vieron limitadas sus ansias de poder.

LOS MISMOS, PERO CON MAYOR CINISMO y VORACIDAD

Un ejemplo reciente de lo afirmado con antelación, son las campañas electorales anticipadas de
integrantes del gabinete presidencial y gobernantes de Morena, así como el uso desmedido y
desvergonzado de los recursos públicos, que siguen condenando en el pasado, pero que practican
que total impudicia en el presente.

En abril del 2015, David Korenfeld renunció al cargo de director de la Comisión Nacional del Agua,
cuando circularon en redes sociales fotografías que lo exhibían utilizando un helicóptero de dicha
dependencia para fines personales, como transportar a su familia a lugares de recreo.
Luego de las fuertes críticas y ser vapuleado por los medios de comunicación (que nunca
guardaron silencio, como se pretende hacer creer en la actualidad por los beneficiados de su
trabajo), el entonces funcionario de Enrique Peña Nieto reconoció públicamente su falta, se
disculpó y renunció.

Desafortunadamente ahora, con los mandatarios “transformadores”, las aeronaves del gobierno
no nada más se utilizan para fines de paseo familiar, transportar a las mascotas de los equipos de
béisbol consentidos de la familia presidencial, también se emplean para trasladarse a realizar
campañas electorales de manera anticipada. Pero eso no es lo más delicado, lo verdaderamente
grave no es siquiera la desviación de recursos, en tiempos de crisis. Lo peligroso son las
consecuencias de ausentarse de las responsabilidades de gobernar, por andar atrás de una
candidatura. Como ha sucedido con la jefa de gobierno de la Ciudad de México y precandidata
predilecta del presidente de la república.

Como parte de sus estrategias electorales, Claudia Sheinbaum Pardo estaba “invitada” a dar una
conferencia magistral, sobre “Políticas Exitosas de Gobierno”, el pasado sábado (7 de enero), a las
12 horas, en el Teatro Morelos, de Morelia. Por tal motivo llegó a la capital michoacana desde un
día antes, para reunirse con algunos de sus operadores electorales del estado, siendo traslada en
un helicóptero facilitado por el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, que obviamente no es de su
propiedad, sino del gobierno del estado.

Pero la conferencia no se llevó a cabo, pues mientras la gobernadora de la capital del país
realizaba campaña en otras entidades federativas, en la ciudad que gobierna se suscitaba otro
accidente en el sistema colectivo Metro y tuvo que regresar de inmediato. El saldo, la muerte de
una joven mujer, más de cien heridos y la defensa férrea del poder presidencial para justificar la
irresponsabilidad del gobierno para dar mantenimiento puntual a ese medio de transporte.