J. Salatiel Arroyo Zamora
Antaño ser de oposición, antigobiernista o activista de izquierda, era lo más digno y honorífico que pudiese existir en la lucha político social. Pues representaba una inquebrantable conciencia de clase, amor al prójimo, profunda preparación filosófica, en la mayoría de los casos Marxista – Leninista – Trotskista, congruencia ideológica y lucha constante contra la opresión, la explotación, el capitalismo y el imperialismo. Todos esos valores se demostraban con privaciones de todo tipo, entrega y sacrificio, incluso de la propia vida, todo por un ideal de libertad, igualdad y bienestar; pero para los demás, no para el luchador o activista: “Para el pueblo todo, para mí nada”.
Los izquierdistas opositores de antes repudiaban de tal manera el poder, la dependencia económica y la subordinación, que les resultaba vergonzoso la sola idea de acceder a algún cargo público o de representación popular. Se luchaba en derrocar a los poderosos, no para ocupar sus lugares, pues esa era tarea de políticos, no para los luchadores sociales. Ellos seguirían vigilando el correcto desempeño de la clase gobernante, que se apegaran al mandato popular.
En la actualidad todo se ha degradado y no se permite que exista oposición política, pues las fuerzas generadoras de equilibrio ante el centralismo, excesos y abusos del poder, resultan incómodas. A los opositores se les prostituye y ellos fascinados se someten en busca de beneficios materiales personales. Los que no acceden a los caprichos de la tiranía, se les hostiga, insulta y hasta se les quita la vida. Luego el estado justificará criminalizando a las víctimas y brindando impunidad a los asesinos, bajo el pretexto de “combatir las causas de la criminalidad”.
Ejemplos de opositores hostigados, vilipendiados y asesinados, son innumerables en el régimen de la 4T. El más reciente, ya con la administradora actual, Claudia Sheinbaum Pardo, es el del presidente de Chilpancingo, Guerrero (PAN-PRI-PRD). Al que decapitaron, a los seis días de haber asumido el cargo. Tres días antes fue ejecutado el secretario del Ayuntamiento y previamente quien fungiría como secretario o director de seguridad pública.
Sin embargo, el motivo principal para que la oposición se someta al dominio del gobierno, no es la amenaza, si no la ambición por la recolección de migajas o el trueque: canjean la exoneración de los delitos y robos cometidos a cambio de aprobar las propuestas del partido en el poder, empinarse y avalar las decisiones y acciones que se dictan desde el poder central.
Así lo hicieron, sin pudor alguno, los dirigentes nacionales de los partidos políticos. Algunos con mayor descaro, como Alejandro Moreno Cárdenas del PRI. En Michoacán igual sucedió con Guillermo Valencia Reyes, presidente del CDE del PRI, al grado de postular a su hermano como candidato del tricolor para fracturar el sufragio opositor y favorecer al partido oficial (Morena).
Octavio Ocampo (del PRD), con mayor hipocresía, hizo lo propio desde antes de la designación de candidatos de su partido, realizando trastadas para imponer abanderados pro gobiernistas, sumisos, para obligarlos después a ponerse al servicio del partido Morena y del gobierno. Resultando ofensivas, por entreguistas y serviles, declaraciones que ratificaban las traiciones, como manifestarse públicamente, y en la principal tribuna del estado de Michoacán (como lo es el Congreso del Estado), aliado de Alfredo Ramírez Bedolla y de Claudia Sheinbaum.
Entreguismo y servilismo que ya era del domino público, con la salvedad de que no se trata de una alianza, sino una adquisición de Ramírez Bedolla, una compra… como quien contrata los servicios de alguien para ultrajarlo, con su respectivo deleite a la postración.
El pretexto, supuestas “coincidencias ideológicas”, que son letra muerta, que nadie respeta… ni siquiera la militancia, aunque el desacato a los documentos básicos sea en su perjuicio y estén siendo desplazado, igual que los fundadores, por arribistas y oportunistas, cuyas traiciones son premiadas con cargos en la administración pública, candidaturas y en efectivo. Eliminando así cualquier posibilidad de resistencia a la concentración de poder e irregularidades del gobierno y su partido.
Insisto, en Michoacán es nula la oposición política y social. Posiblemente la habrá en el futuro, pero será de carácter electoral, representada por Alfonso Martínez Alcázar, aspirante a la gubernatura.
También habrá fracturas, o se incrementarán, al interior del partido en el gobierno: por un lado, Raúl Morón Orozco, por otro Fabiola Alaníz Sámano y la facción del gobernador Alfredo Ramírez, representada por el Secretario de Gobierno, Carlos Torres Piña, con más asalariados contratados en el gabinete para operar.
En lo local, el presidente de Zitácuaro, Juan Antonio Ixtláhuac, igualmente aspira a la gubernatura. Pero lo hace como una estrategia para poder conservar el monopolio del partido Morena y el control de las candidaturas, él a la diputación federal, su hermana Vanesa a la presidencia municipal y Juan de Dios a la diputación local. Ya en otro momento él y su familia han puesto en práctica esa misma táctica, de ir al mismo tiempo como candidatos. Aunque ´por partidos diferentes. Pero hoy sería por la misma coalición: Morena-Verde-PT. Tal vez en este caso nuevamente el PVEM no se sume a los Ixtláhuac Orihuela.
Obviamente Toño y su familia podrían tener resistencias internas, la mayoría simuladas o con el propósito de negociar posiciones, dinero u otros privilegios, a favor de los “ideólogos” y operadores de esa oposición fingida o previamente pactada.
Entre los personajes que (al interior del partido o coalición en el poder) buscarán candidaturas, se prevé a la legisladora federal Mary Carmen Bernal Martínez, como aspirante a la presidencia municipal. Lo mismo que la familia Rivera Camacho, cercanos a la dinastía Orihuela desde que estos dominaban en el PRI. El proyecto del grupo de los Rivera sería encabezado por la diputada local, Emma Rivera.
En tanto, el grupo del Senador Raúl Morón Orozco, Leonel Godoy Rangel y Fidel Calderón Torreblanca, es el más sumiso a los intereses del gobernante municipal, desde que Ixtláhuac fue candidato a presidente municipal del PRI, lo que se reiteró como abanderado del PRD-PRI-PAN, y ahora en Morena-PT. La mayoría de los “liderazgos” de dicha facción tienen a un familiar o referente cobrando en la nómina municipal desde la administración pasada, otros son convencidos con el otorgamiento de “reconocimientos” propagandísticos.
No olvidemos que fue precisamente el jefe de dicha tribu, Raúl Morón, quien destapó a Toño Ixtláhuac como aspirante de Morena a la reelección por la alcaldía. Así que los seguidores del Senador y aspirante a la gubernatura tendrán que subordinarse a la voluntad del alcalde y a favor de la continuidad de dicha alianza.
No obstante, en Zitácuaro, sí existen liderazgos que podrían generar contra pesos al cacicazgo, ahora camuflado por Morena, en el municipio:
Una de esas fuerzas sería encabezada por Armando Flores Martínez, conocido con el mote de “el güero”, quien estaría disputándole a su paisano Carlos Herrera Tello el control del partido Movimiento Ciudadano en el estado, luego de ser aliados.
Otro fuerte liderazgo sería construido o consolidado por Silvestre Chávez Sánchez, Armando Carmona Guzmán y las comunidades indígenas con Autogobierno, que tendrían planeado operar la implementación de dicha figura en las 18 localidades del municipio (13 tenencias y 5 encargaturas del orden). De concretarse dicho programa de gobierno que, al menos en la región oriente, está resultando exitoso, tendrían de manera anticipada un amplio porcentaje de la victoria electoral asegurado. Más aún, si fuese por el Partido Verde, que lograra arrebatar a los grupos tradicionales de poder, en Morena y PT, la nominación.
Las anteriores son las fuerzas políticas electorales que podrían constituirse como oposición electoral real. Pues, lo que queda del PRI, PRD y PAN en Zitácuaro, ha sido impregnado por la ambición personal de satisfactores individuales y avasallados por el gobierno local o estatal, a cambio de la incorporación en la saturada nómina municipal u otros beneficios. Los que todavía han resistido en dichos partidos políticos “opositores”, andan buscando asimismo la manera de irse a la “cargada” con el gobierno, tocando “puertas”, ofreciendo su cariño al mejor postor. Pues todos ellos son partícipes de la idea de que: “Vivir fuera del presupuesto, es vivir en el error”.