Boris González Ceja
Muchas personas tienen la duda de que hace un psicólogo y qué un psiquiatra. La psiquiatría y la psicología son dos ciencias que persiguen un mismo fin: el bienestar mental. No obstante, cada una cuenta con estrategias distintas de atención, ambas son importantes y una no puede suplir a otra en cuanto a tratamientos mentales.
En México hay un poco más de 4 mil psiquiatras y más de 350 mil psicólogos, dato que revela la importancia y cobertura de la psicología en todo el territorio. El 80 % de los psicólogos son mujeres, trabajan en la práctica privada y se ubican en las zonas urbanas. La psicología es una de las 10 carreras peor pagadas y más precarizadas laboralmente en México ¿por qué será?
El psicólogo es un científico que estudia el comportamiento de las personas y puede trabajar a nivel clínico, social o educacional. Su identidad está marcada por el uso profesional del lenguaje como una potente arma para sanar los trastornos psicológicos.
La psicología clínica es el área de la psicología que más coincide con la psiquiatría, ya que su objeto de trabajo es el trastorno mental. Los objetivos de los psicólogos clínicos son la evaluación y diagnóstico, tratamiento e investigación en el ámbito de los trastornos mentales. El psicólogo no posee la habilitación legal ni la formación necesaria para hacer uso de medicamentos como ansiolíticos y antidepresivos, por lo que, si usted conoce a algún psicólogo que receta medicamentos, es necesario realizar la denuncia ante la autoridad correspondiente en su comunidad. El psicólogo sí es un profesional que podrá orientarle en temas de salud mental.
Por otro lado, el psiquiatra es un médico que realiza acciones de medicación para las personas con problemas que requieren medicación profesional, y hay que decirlo, solamente se le da medicamento a la gente cuando tiene niveles muy altos de depresión o ansiedad por ejemplo, considerando que siempre la primera opción son los psicólogos, porque si no entendemos esto, la gente que no tiene la información oportuna termina medicándose sola, abusando del medicamento al grado de drogarse y no asiste con un profesional de la salud mental que sea serio y le ayude para atender su problema actual.
También hay que decir que un psiquiatra no está formado para utilizar con destreza los tratamientos psicológicos ni los instrumentos diagnósticos desarrollados por la investigación psicológica. Los psicólogos son en general quienes dominan de manera profunda los problemas sociales de salud mental. El psiquiatra si apoya los tratamientos psicológicos reduciendo los síntomas psicóticos, de ansiedad o la depresión grave, por ejemplo, de manera controlada con medicamentos.
La historia de la psiquiatría y de la psicología es amplia, y hay que saber que el modelo psiquiatrizante no es funcional para las actividades de la psicología moderna, y por más que se quiera desinformar a las personas de que la psiquiatrización de la población es la regla por seguir, los resultados en los tratamientos comunitarios de salud mental y las personas en sus percepciones sobre psicología y satisfacción de atención, tienen la última palabra, con las estadísticas por todos conocidas de adicciones o suicidios.
La reciente reforma a la Ley de Salud en materia de salud mental establece un límite para la psiquiatrización, que con anterioridad abusaba del internamiento para la atención; no se consideraba que dicho tratamiento debe ser voluntario, previo consentimiento informado y privilegiando opciones comunitarias. El problema iba más allá en los abusos, con tortura en los centros de internamiento: se aplicaba un sistema de tratamiento entre militar y religioso, que ya la CNDH ha denunciado.
Pensar en una ventaja de la psiquiatría sobre la psicología es un abuso, porque se impone la necesidad de cooperación, tal y como se recomienda por expertos internacionales.
En mi página de Facebook respondo todas sus dudas sobre el tema: https://www.facebook.com/boris.gonzalez.35
Causas y Azares…
- Con más de 100 mil desaparecidos y más de 125 mil personas ejecutadas, es momento de que la ciudadanía alce la voz para exigir seguridad, a través de la ejecución de recursos suficientes para los servicios de atención comunitaria de psicología; siempre hemos sostenido que la salud mental equivale a salud social. El Secretario de Gobierno nos está dejando a deber en el tema.
- Me comparten informes desde el gremio de los psicólogos mexicanos solicitando a los diputados y senadores una Ley de Salud Mental específica, pero han sido omisos a sus obligaciones.
- Se acercan las votaciones por nuevos puestos en la administración pública, allí existe la oportunidad de votar por quienes apoyan la salud mental, y por quienes no simulan ni engañan al pueblo bueno.
- De los candidatos presidenciales, ¿quién apoya la salud mental?
Hasta la próxima, que el verbo leer, como amar y soñar, no soportan el imperativo.