Al inicio de cada año los videntes y místicos dan sus premoniciones para cada año, el ser humano con una sed infinita por saber del futuro pone sus esperanzas en horóscopos y señales, sin embargo ese espíritu parece haberse esfumado, en estos días enero pasó volando, las fiestas se fueron y los hospitales se llenaron, la pandemia nos ha robado la oportunidad de replantear nuestros tradicionales propósitos de año nuevo, de preguntarnos cuáles son tus deseos para este año?
Tal vez ponderamos la salud más que el dinero, o el trabajo que se fue en medio de la crisis pedimos regrese, para otros el milagro de vida, y contradictoriamente para otros el mundo sigue rodando, no cambia, no se para, en un ambiente electoral, la sociedad sigue en movimiento, la violencia crece terriblemente en este confinamiento, y para la mayoría la vida simplemente continua su curso, para quienes se ganan el pan todos los días las noticias son solo cortinas de humo porque es tiempo de trabajar y traer sustento a la familia. El brindis de fin de año parece un sueño cuando la realidad se percibe dramática ante las situaciones económicas y de salud a las que nos enfrentamos, cuando la humanidad no se humaniza, donde lo material sigue ponderando más que lo intangible.
La numerología es una ciencia exacta, madre de las matemáticas nos muestra que cada número trae consigo una energía característica: 2-0-2-1= 5suma un año cinco, y en él encontramos un año lleno de movimientos, de versatilidad, bueno para concluir los estudios pendientes, para inicio de proyectos nuevos, negocios propios, pero lo más importante es tiempo de disfrutar, de merecer, después de la siembra viene la cosecha, el precio ya fue pagado, es buen momento para despojarse de la culpa para disfrutar la vida.
En numerología, no existe el misticismo ni clarividencia, hay una misión en cada número del 1 al 9, y cada persona tiene el propio por su fecha de nacimiento y también cada año de la vida, este 2021, mantiene la conclusión de una década (20) y comienza la fuerza de un nuevo camino (1), así que se abren los senderos de aquello que tenía trabas en la conclusión de proyectos, las oportunidades vuelven a abrirse, terminar una relación que por años ha sido difícil de concluir.
Cómo pensar en un año tan lleno de gozo y alegría cuando pasamos tiempos difíciles mundialmente, el capitolio fue violentado, una nueva cepa llegó a Inglaterra, he leído notas que alarman con el fin del mundo. Que diferencia habría si habláramos más de lo bueno que ocurre, que de lo malo, si bien millones han muerto, millones más han sanado, quien perdió su empleo ante la pandemia uso su creatividad y abrió un pequeño negocio de servicio a domicilio o de limpieza, éstos últimos son solo ejemplos de cómo podemos percibir nuestro entorno. Cómo pretendemos recibir este año 2021, lleno de noticias que roban la paz, o con la oportunidad de disfrutarlo y celebrarlo?
Parece muy ambigua esta descripción, ilusoriamente esperanzadora después de un año de caos, así pareciera, que el fuerte movimiento que generará este año no te arrastre al estrés, optimiza la energía de un gran año 5, y sustituye la palabra “quiero” “deseo” por “merezco en este 2021….” “merezco tener salud, un mejor trabajo, una buena vida, merezco ser feliz” haz este pequeño ejercicio, cierra tus ojos, respira profundamente, dilo en voz alta y visualízalo, créalo en tu mente, aquieta ese pensamiento, arrópalo en una burbuja y dibuja en él un resaltante número cinco, bien, hazlo tuyo ese sueño ese deseo ya es real, no tienes que pagar por ello, porque ya lo trabajaste, ya lo sufriste, ya lo sembraste, ahora simplemente lo mereces, esa es la fuerza de un año cinco, el año del merecimiento.
Qué mereces??
Bety Barrientos
Numeróloga