A dos días de la ejecución del alcalde de Tacámbaro, Salvador Bastida García y su chofer, el Guardia Civil Pastor Cortez Álvarez, nuevos datos en poder de la Fiscalía estatal, revelan que dentro de la camioneta blindada iba una tercera persona, el copiloto, quien sería el asesino material y que está prófugo.
Chavo Bastida y su chofer, fueron asesinados la noche del pasado jueves, cuando arribaban a la casa del alcalde provenientes del municipio aledaño Turicato, donde se habrían reunido con la edil de ese lugar; en el asiento del conductor perdió la vida el chofer – escolta, mientras que Chavo Bastida perdió la vida en un hospital.
Ahora se sabe que en la camioneta viajaba una tercera persona, otro escolta, quien disparó a quemarropa primero al chofer y luego al alcalde, lo que explica la razón que la camioneta blindada no presentara impactos desde el exterior.
Chavo Bastida estuvo al frente del Ayuntamiento de Tacámbaro ocho meses y en ese lapso, se vio involucrado en fuertes escándalos por sus presuntos nexos con el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) investigados por la Fiscalía General de la República (FGR) y por contratar como Tesorero a un expresidiario en Estados Unidos.
De acuerdo con la FGR, además del alcalde Bastida, Edgar Raúl Flores Silva, Gabriel Villaseñor Zamudio y Ramón Raudel Campos Murillo —director de Seguridad Pública, subdirector de la misma corporación y extesorero del Ayuntamiento, respectivamente—, participaron en reuniones con el CJNG.