Rueda de Molino/#ConMisNarcosNoTrump

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Jorge Hidalgo Lugo

El señalamiento-acusación por contundente, claro y directo, no dejó lugar a dudas. Cumplió así Donald Trump un compromiso con sus electores que suman millones, pero además cerró el paso a las especulaciones que se hicieron respecto a que estaba blofeando o no cumpliría sus amagues porque sería tanto como “ponerse un balazo en el pie”, según los advenedizos propagandistas del narco gobierno hoy en capilla.

Desde la Casa Blanca, sin miramiento alguno, en papel membretado, el ogro del bisoñé escribió el comunicado dirigido a sus narco vecinos donde se destacaron sendas denuncias públicas:

“Los cárteles mexicanos son los principales traficantes de fentanilo, metanfetamina y otras drogas del mundo. Estos cárteles tienen una alianza con el gobierno de México y ponen en peligro la seguridad nacional y la salud pública de los Estados Unidos”.

“…Las organizaciones de tráfico de drogas mexicanas tienen una alianza intolerable con el gobierno de México. El gobierno de México ha proporcionado refugios seguros para que los cárteles se involucren en la fabricación y el transporte de narcóticos peligrosos, lo que colectivamente ha llevado a la sobredosis de cientos de miles de víctimas estadounidenses. Esta alianza pone en peligro la seguridad nacional de los Estados Unidos, y debemos erradicarla…”.

Por toda respuesta surgieron los lances de heroicidad retrógrada, patriotismo trasnochado, simulación para ocultar la responsabilidad que en verdad tiene el narco gobierno aludido.

Así surgieron miles de declaratorias que invocaron al nacionalismo mexicano, a no estar dispuestos que se violente “nuestra soberanía”, ni permitir la injerencia externa, ningún “intervencionismo que violente nuestra autonomía”, por parte de exponentes de la nueva mafia en el poder, más como un mecanismo de defensa particular que un interés auténtico de enfrentar las acusaciones en el terreno de los hechos.

Se habló además de tener planes A, B, C, D… hasta llegar a la Z, con que supuestamente estaríamos preparados para enfrentar el avasallamiento del ogro estadunidense, y se manipuló al extremo la discursiva de impedir la violación a los “derechos humanos” y hasta convocar a la “unidá” nacional a todos los indigentes del bienestar, sin dejar de lado a aquellos a quienes desde el poder, han humillado, vejado y destruido sus garantías individuales con las reformas legales que hoy tienen al narco país camino a la dictadura perfecta.

Pero todo entró en un compás de espera cuando la marioneta envuelta en el mancillado lábaro patrio, el mismo que desde el mandato cuatrotero han hecho trizas, salió a informar el resultado de una conversación telefónica sostenida con el arrogante mandatario estadunidense:

“Sostuvimos una buena conversación con el presidente Trump con mucho respeto a nuestra relación y la soberanía; llegamos a una serie de acuerdos:

1.México reforzará la frontera norte con 10 mil elementos de la Guardia Nacional de forma inmediata, para evitar el tráfico de drogas de México a Estados Unidos, en particular fentanilo.

2.Estados Unidos se compromete a trabajar para evitar el tráfico de armas de alto poder a México.

3.Nuestros equipos empezarán a trabajar hoy mismo en dos vertientes: seguridad y comercio.

4.Se ponen en pausa los aranceles por un mes a partir de ahora.

En tanto que por la misma vía Donald Trumpo festejaba haber doblegado a la Científica con el siguiente texto:

“Acabo de hablar con la presidente de México, Claudia Sheinbaum. Fue una conversación muy amistosa en la que ACCEDIÓ a suministrar inmediatamente a 10 mil soldados mexicanos en la frontera separando a México y los Estados Unidos. Estos soldados serán designados específicamente para detener el flujo de fentanilo y los migrantes ilegales a nuestro país. Además, acordamos pausar inmediatamente los aranceles anticipados durante un periodo de un mes durante el cual tendremos negociaciones encabezadas por el Secretario de Estado Marco Rubio, el secretario del Tesoro, Scott Bessent y el secretario de Comercio, Howard Lutnick, así como otros representantes de alto nivel…”.

La tregua que coincide con el mes del amor y la amistad, no hace referencia en ninguno de los casos a lo que sería obligado por parte del bando acusado, como exigir una disculpa o por lo menos se retractara de su dicho el petulante petirrojo.

Pero no hubo tal, no se reclamó airada y vivamente que en el aire quedará la acusación que pesa en contra del ya considerado también por el neutro gobierno de Canadá, un problema prohijado por la connivencia entre autoridades de gobierno y las células criminales, a las que el país de la hoja de maple por igual, ya considera también como terroristas.

Lo ideal habría sido escuchat un mensaje dirigido a la nación y luego plasmado en papel membretado del gobierno de México exigiendo se compruebe la gravísima acusación, para entonces sí dar trato de heroína émula de Josefa Ortiz de Domínguez, Leona Vicario, la Adelita, la Valentina o cualquier figura femenina destacada en la historia del México hoy maltrecho y deteriorado que sigue desangrándose por el embate del narco crimen.

Y como el que calla otorga lo único que queda de todo esto es que Trump vuelve a arrodillar a su indeseable vecino del sur, lo mete al terreno que él considera adecuado y lo mantiene contra las cuerdas, con el señalamiento como bandera, de la colusión entre narcos y autoridades cuatroteras, pero además con el imbatible paso marcial, arrollador y no poco salvaje en busca de dejar constancia que en este mes de tregua no cejará en su intentona de descobijar y, una vez detectados con trabajos de inteligencia avanzada, combatir a los terroristas en suelo mexicano.

Porque de otra manera no se explica, tampoco se entiende que los patrioteros que se desgarraron las vestiduras nacionalistas en la víspera, estén callados como focas ante las evidencias que surgen de la intervención armada que se fragua, como indica la presencia de la Guardia Costera de los Estados Unidos en aguas nacionales tanto del Pacífico como del Golfo de México.

Lo mismo los vuelos detectados de aviones militares sobre territorio azteca, que violan los espacios salvo que en ambos casos forme parte también del acuerdo en esa “conversación muy amistosa en la que (Claudia Sheinbaum) accedió” a los planteamientos hechos por el mandatario estadunidense como condición para no incrementar los aranceles a productos mexicanos, pero que no sabemos en realidad el contenido real de ese diálogo.

Así mientras nos quedamos en espera que haya una satisfacción pública respecto a lo dicho oficialmente por el flamante nuevo huésped de la Casa Blanca respecto a que “estos cárteles tienen una alianza con el gobierno de México y ponen en peligro la seguridad nacional y la salud pública de los Estados Unidos”, hoy vemos desfilar a miles de militares que se asentarán en la frontera para realizar las atareas que les exige el iracundo republicano.

En tanto se desvanece el agravio que ante el mundo nos coloca como un narco país luego del aserto que nos endilgan sobre que “…el gobierno de México ha proporcionado refugios seguros para que los cárteles se involucren en la fabricación y el transporte de narcóticos peligrosos”, los de a pie, quienes estamos en medio del fuego cruzado, no tenemos en quién refugiarnos o pedir ayuda.

Esto porque los pocos militares que aún estaban en tareas castrenses, no de albañiles ni sospechosos vigilantes de puertos, fronteras y terminales aéreas, ahora tendrán que ir a acampar al pie del muro de la ignominia para evitar que se importune la tranquilidad del prepotente vecino.

En tanto que en el narco país sigue la acometida que nos regalan día con día las bandas delincuenciales con su generosa cuota de ejecutados, desaparecidos, extorsionados, secuestrados y, aún más, encargados del tráfico de personas, muchos de ellos con la encomienda precisamente de lucrar con las ilusiones de quienes buscan afanosos alcanzar el sueño americano, bajo el yugo y condiciones que les imponen los delincuentes protegidos por Morena y sus autoridades de todos los niveles.

Así las cosas, sigamos en espera que el segundo piso de la transformación, tome un descanso mientras hace vibrar la conciencia nacional al grito, la proclama patriotera de: #ConMisNarcosNoTrump…

Vale…

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