Desde hace tiempo, he dicho que la política popular, la política internacional, así como la política económica son totalmente distintas en tiempos y formas.
Hace unos días la presidenta Claudia Sheinbaum voló a Brasil, en un avión comercial para representar a México a nivel internacional con este grupo de 20 potencias.
El pasado sexenio, no tuvimos representación del poder ejecutivo, porque no AMLO no le daba importancia o simplemente no era acorde con su política internacional, que fue caracterizada por peleas con otros países, además de exigencias absurdas.
En este tipo de reuniones, los mandatarios tienen dos grandes momentos, uno, el público, durante cinco minutos toman el micrófono y hacen una declaración pública, en la que se espera una participación enfocada a los objetivos de este grupo, cambio climático, hambre, pobreza energías limpias, paz y el segundo momento, el privado, tienen encuentros de aproximadamente 10 minutos con otros mandatarios, donde deberían de aprovechar, el tiempo de una manera muy ejecutiva para servir de picaporte, y allanar el camino, para que los representantes de la política exterior de los países, después le den seguimiento a lo platicado por los mandatarios.
Los cinco minutos de micrófono de la presidenta Sheinbaum, los utilizó para enaltecer los logros del sexenio anterior, el crecimiento del salario mínimo, los programas sociales, incluso tratar de llevar el programa sembrando vida a una escala del grupo de los 20.
De lo que se filtró de las reuniones en corto con otros mandatarios, trascendió el tema del Mayo Zambada con el presidente Biden, cuando en la agenda bilateral hay temas de mayor importancia para el país, tales como la migración y permanencia de México dentro del TLCAN.
En los últimos días, Doug Ford, gobernador de Ontario, ha sugerido que Canadá, debe firmar un tratado de libre comercio con Estados Unidos y uno por separado con México, sugiriendo que nuestro país está generando una competencia desleal, al introducir partes chinas de baja calidad, etiquetándolas de Hecho en México, por lo que hubiera sido importante abordar este tema en las reuniones privadas con Biden y Trudeau.
En comercio, México es una amenaza para Canadá, ya que somos el principal socio comercial de Estados Unidos y Canadá el tercero, después de China, sin embargo, el principal socio comercial de Canadá es Estados Unidos, lo cual desequilibra su balanza comercial, de ahí el interés de quitar a México de en medio del TLCAN.
El resultado de estos acercamientos, lo veremos seguramente en las próximas semanas donde el seguimiento de Juan Ramon de La Fuente, se note para fortalecer el Tratado de Libre Comercio con Europa, así como los lazos con Estados Unidos y mejorar la relación con Canadá, a unos meses, nos espera la revisión del TLCAN, donde ya no nada más nos enfrentaremos a la ironías y amenazas de Donald Trump, sino también al rechazo ahora de Canadá.
POSDATA:
“… Hace muchos años, un profesor de relaciones públicas, me enseñó, que si en un elevador te encuentras a una persona importante debes de ocupar los 30 segundos que tienes en decir algo trascendental y no perder el tiempo…”
¡Es tiempo de los ciudadanos! …. globalizados!!!
Abelardo Pérez Estrada
Empresario, Analista, Expresidente CANACINTRA